En este artículo vamos a intentar responder a la pregunta que muchas veces se hacen los responsables de seguridad de los edificios o los presidentes de las comunidades de propietarios: ¿es posible poner cerradura en una puerta cortafuegos? La respuesta es que sí, pero con matices. A continuación, te explicamos por qué.
Cuáles son las características técnicas de una puerta cortafuegos
Antes de nada, tenemos que aclarar cuáles son las características técnicas de las puertas cortafuegos, porque, por razones obvias, serán muy similares a las que deben tener las cerraduras, ya que una vez colocadas formarán un conjunto que tiene que tener el mismo comportamiento en caso de incendios.
- Resistencia al fuego de tres horas como mínimo: la resistencia al fuego es una característica común de la normativa de construcción para los distintos materiales que se emplean. En el caso de las puertas, es la capacidad que estas tienen para contener que un fuego las atraviese y se propague al resto del edificio. Como mínimo, se exige que sea resistente durante tres horas.
- Resistencia mecánica al fuego: durante ese tiempo mínimo, la puerta debe conservar la estabilidad estructural. La puerta tiene que conservar su forma y no ceder ante las llamas, para evitar que se propaguen.
- Estanqueidad: la puerta tiene que poder retener tanto el fuego como los gases y los humos para que no pasen de la parte que está ardiendo al resto del edificio. Debe ser capaz de aislar térmicamente para que el calor no se transmita a través de ella.
- No emitir gases inflamables ni humos: en su proceso de combustión retardado, la puerta no puede emitir gases inflamables ni humos.
- Cierre con astrágalo: el astrágalo es un molde especial que se coloca en una de las dos hojas de la puerta y que impide que pase humo, gases o calor.
¿Se puede poner una cerradura en una puerta cortafuegos?
En las puertas cortafuegos hay una normativa muy específica que regula sus características técnicas que aseguran su resistencia ante el fuego. En cuanto a las cerraduras, existe un principio que es el minimizar su uso, ya que en situaciones de incendio la cerradura puede ser un obstáculo incompatible con la seguridad.
Las puertas cortafuegos se encuentran colocadas en las vías de evacuación. La idea es ir cerrando puertas tras las personas, para dejar las vías de escape libres de fuego. En estos casos no tiene mucho sentido que, a medida que vamos huyendo del fuego, tengamos que ir abriendo puertas con llave.
Pero, a veces, es imprescindible que haya cerraduras en las puertas cortafuegos por motivos de seguridad. Las puertas cortafuegos que también impiden el paso de extraños podrán llevar cerraduras. Por ejemplo, cuando la vía de evacuación es a través del garaje, la puerta cortafuegos que separa esta del recibidor del edificio sí podrá tener cerradura, porque si no podría entrar fácilmente cualquier persona. En este caso, habría una cerradura para poder pasar del recibidor al garaje, pero nunca al revés, para evitar que la puerta se quede cerrada en caso de incendio.
Características que debe tener una cerradura para una puerta cortafuegos
En cuanto a las características técnicas que deber tener las cerraduras para las puertas de fuego, estas son las mismas a las que tiene la propia puerta. Debe ser resistente al fuego durante tres horas y asegurar la estanqueidad a la vez que no emiten gases ni humos.
Las puertas cortafuegos son un elemento esencial de seguridad en caso de incendios. Si tenemos que cambiar o arreglar una cerradura, tendremos que recurrir a un profesional cualificado como cerrajeros madrid GROUP y utilizar solo materiales homologados que cumplen la normativa.